Desde bien pequeño me tiraba horas en el mar, salía como un garbanzo. De niño me encontré en la playa unas gafas de buceo de las que llevaban el tubo incorporado.... me tenían que sacar mis padres con grúa. He estudiado Biología en la Universidad Autónoma de Madrid, y fue en esa época cuando me puse por primera vez una botella de buceo, fueron 10 minutos y bajé a unos 5 metros, pero aluciné... El caso es que no hice el curso hasta 1997; hoy soy Divemaster y he buceado sobre todo en Calabardina (Águilas), aunque conozco el Caribe, el mar Rojo, Maldivas e Indonesia. Me encanta bucear y sentir la ingravidez, la sensación de libertad, la de respirar en un medio en el que sin equipo no podría...., y ver vida, disfrutar con cada ser vivo que me encuentro allí abajo, dejando burbujas.... No puedo dejar de mencionar a mi buen amigo, Diego Martínez Díaz –todo un personaje– de quien he aprendido a bucear y a ser mejor persona. Soy profesor en el IES Lázaro Carreter de Alcalá de Henares en el que imparto clases de Ciencias Naturales a chavales de ESO.
